¿Cuantas veces hemos deseado, o mejor dicho cuantas veces nos hemos acercado realmente a mi Padre?

¿Por qué esperar a que siempre se presente un inconveniente, o un imprevisto para pensar en Él?

¿Por qué siempre pedimos que escuche una plegaria, en vez de platicar, y sentir a mi Padre?

¿Por qué maravillarse de las palabras del orador, en vez de maravillarse de escuchar sus palabras que siempre han estado ahí?

¿Cuantas personas necesitan ver, y oír primero, antes de creer, o escuchar realmente su voz, o sus palabras?

Unos entienden a su parecer, de tal forma que parece necesario un intermediario, y otros creen en lo material, en lo hecho en sus peticiones, y otros mas creen, hasta que sus súplicas, son contestadas.

¿Por qué esperar un suceso, y no esperar un evento?

¿Por qué esperar escuchar o ver antes de aprender a sentir?

Tú, preguntas siempre por ti, pero si preguntaras por tu alrededor, tus respuestas ahí estarían.

Todo depende de cada quien, es mas, todo depende de el interés hacia lo escuchado, o lo visto.

Cada palabra, tiene un propósito en cada individuo, es decir, las palabras de mi Padre tienen diferentes efectos, y resultados en cada individuo.

Es como poner a dos seres a levantar un mendrugo de pan del suelo.

El primero tiene todo y su hambre esta saciada, su reacción será la de recoger, y guardar, ignora, lo que no necesita.

El segundo, hambriento, y con necesidad, recogerá y saciará su hambre.

Más todo esto sería diferente, si el primero recogiera, y agradeciera a Dios, por ponerle en su camino mas sustento del que no necesita.

Y si el segundo agradeciera, por permitirle saciar su hambre, y su necesidad del momento.

Cada uno tiene un propósito, y una necesidad, pero cada uno debe de ver que mi Padre, solo muestra que ahí está, y que siempre escucha.

Dichosos los que entiendan.

Siempre nos disgustamos, o no, nos conformamos con lo que tenemos, y siempre queremos más y más, al punto de pensar que, si queremos mas, demostramos una ambición positiva de vida, así como un no conformismo propio.

Mas te diremos que es el error mas grande, ya que si tu ambición fuera no solo, la de saciar tu ego personal, e intentaras mas ambición, para ayudar a mas semejantes, distinguirías que seria un fin placentero, para ti, y para los tuyos.

Entre mas se quiere, mas responsabilidades se adquiere, ya que, si todo es para saciar mas y mas, de igual forma se ira perdiendo.

En algunas ocasiones lo perderás en vida, y en otras, solo serás testigo desde la otra vida de cómo se pierde, y no por ti, si no por tu estirpe.

No existe rico, ni pobre eterno.

Lo que siembras cosechas, lo que recoges es lo que a simple vista es placentero, mas sin en cambio, si la tierra se daña poco a poco, la cosecha será menos hasta que ya no haya mas nada que recoger.

Pides y pides, y vuelves a pedir por ayuda, que si observaras, no la necesitas, que si fueras buen aprendiz de vida, notarías que ya la respuesta existe, y que solo necesitas ver a tu alrededor.

Ruegas y lloras cuando tu desesperanza esta en la cima, y recuerdas el nombre de mi Padre, para que calme tu dolor, mas diremos que tu silencio, es escuchado sin ruegos y llantos, si tu acercaras cada vez más a mi Padre.

Mi Padre está para ti, cada vez que tú quieras, más de igual forma tu debes de estar con mi Padre, sin prejuicios y cuando el te lo pida.

Nunca pienses que mi Padre no te escucha, mejor piensa que, así como tú, hay más hijos que atender.

Cada vez que sientas que tus penas, o tus dolores son infinitos, voltea tus ojos a cualquier rincón y escucharás, así como verás que tus problemas son menores y con solución.

No esperes que mi Padre solucione algo, que tú, puedes resolver.

Dichosos los que entiendan.

Las palabras de mi Padre están por todos lados, pero, sobre todo, están para quienes quieran sentirlas.

Así que no temas preguntar, pero mucho menos, temas recibir la contestación.

Ya que muchas veces, preguntas y se te responde, pero tu ceguera interior, te impide ver la respuesta, que se te ha proporcionado.

Quisiéramos recibir una contestación de la forma en la que nosotros preguntáramos, pero hay muchas formas de decir, ésta, es tu solución, o ésta, es tu respuesta.

Cree en tu mente, así como en lo que escuches, ya que no estas loco, simplemente estas recibiendo la respuesta de tu consulta.

El que es pobre, quiere ser rico.

El que es rico, quiere poder.

El hambriento, quiere comida.

La soledad, quiere compañía.

Los amorosos, quieren relaciones.

Los padres, quieren más denarios.

Los enfermos, quieren salud.

Los ciegos, quieren vista.

Los inválidos, quieren sanar.

Los crueles, quieren piedad.

Los trabajadores, quieren más jornal.

El cansado, quiere descanso.

El joven, quiere vivir.

El anciano, quiere juventud.

El maduro, quiere sabiduría.

El tonto, quiere inteligencia.

Los religiosos, quieren fieles.

Las parejas, quieren hogar.

Las mujeres, quieren igualdad.

Los hombres, quieren superioridad.

Las plantas, quieren agua.

La oscuridad, quiere luz.

Todos quieren algo, pero hasta cuando realmente quieren primero a mi Padre.

Si quisieras primero a mi Padre, y escucharas, verías que todo lo que queréis ha sido otorgado.

¿Qué pasa, si a un rosal se le hecha agua de mas?

Dichosos los que entiendan.

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