EL HOMBRE QUE MIRA EN LAS NOCHES

La siguiente leyenda urbana es muy común en varios hogares de México, y aunque en muchos casos se ha intentado reducir su credibilidad, lo cierto es que los que lo han vivido, siguen hasta el día de hoy, guardando en sus mentes el recuerdo de esa mirada que de la nada aparece en las noches de calma.

Varios de los testigos, cuentan que, por las noches, por lo regular después de las 12 de la noche, cuando el insomnio los ha invadido, o en su defecto por ciertas circunstancias se encuentran despiertos después de esa hora, sienten una mirada penetrante, la cual no saben inicialmente de donde viene, lo que provoca escalofrió y temor ante lo inexplicable.

Sin embargo, después de estar sintiendo la mirada penetrante, cuando logran acostarse a descansar, logran observar en el espejo de sus cuartos, en las ventanas, un medio rostro de un varón de aproximadamente 40 años, que los está observando fijamente.

Cuando se paran a ver o encienden las luces, el rostro y los ojos desaparecen, sin embargo, pasados 10 o 30 minutos después, el rostro vuelve a aparecer, para después de aproximadamente 5 minutos de estarlos observando, desaparecer como si nada.

“Recuerdo haber llegado a mi casa, eran aproximadamente las 12:30 de la noche, al entrar a mi cuarto, después de cambiarme, decido empezar a despintarme, cuando empecé a sentir una mirada muy fuerte, una mirada que aunque no sabía de donde venía, sabía que estaba ahí, aunque inicialmente no vi a nadie, empecé a auto concentrarme que no había nadie, pensaba que me estaba sugestionando de algo, sin embargo, cuando me acuesto en mi cama, y volteo a mi espejo, veo como un rostro de la nariz para arriba de un hombre que me estaba mirando fijamente, me pare rápidamente asustada, prendí la luz, y no había nada ni nadie, asustada, apague la luz, y cuando observo de nueva cuenta el espejo, y veo de nueva cuenta ese rostro, el cual me miraba fijamente, al pararme de forma inmediata, prender la luz, ya no estaba….”

“Su mirada es penetrante, ese observa la mitad de un rostro de un hombre de unos 40 años, con pelo negro, peinado hacia atrás, mirada fija y muy rara, incomoda, lo impresionante, es que al prender la luz se va o desaparece…”

Nadie, absolutamente nadie que lo ha visto, puede describir su rostro completo, sin embargo, todos los que lo han visto, coinciden, que su mirada además de ser fija, genera miedo, escalofrió y da una sensación de invasión…

¿y tú has visto los ojos del hombre en tu cuarto?