CONSEJOS PARA PREPARARSE CONTRA EL CORONAVIRUS EN CASA

El doctor Hans Heri P. Kluge explicó que las medidas sin precedentes para ralentizar y frenar la transmisión del COVID-19 y rebajar la presión sobre nuestros sistemas de salud, tienen un coste social y económico elevado. La distancia física, el aislamiento, el cierre de colegios y de los centros de trabajo suponen un desafío, ya que impiden lo que nos gusta hacer, dónde queremos estar y con quién queremos estar.

Ante dicha circunstancia, y ante los acontecimientos que se viven a nivel mundial, se emitieron los siguientes consejos para poder estar preparados en contra del coronavirus.

  1. establecer una dieta saludable y nutritiva, que ayude a su sistema inmunológico a funcionar correctamente
  2. limitar el consumo de alcohol y evitar las bebidas azucaradas
  3. no fumar, porque puede aumentar el riesgo de desarrollar una enfermedad grave si se contrae el COVID-19
  4. hacer ejercicio. La Organización Mundial de la Salud recomienda entre 30 y 150 minutos de actividad física para los adultos y una hora al día para los niños
  5. si las medidas locales o nacionales lo permiten, salir a caminar, correr o viajar, y mantenerse a una distancia segura de los demás. Si no se puede salir de la casa, buscar un video de ejercicios en línea, bailar, practicar yoga o subir y bajar las escaleras
  6. para el teletrabajo desde casa, se recomienda no sentarse en la misma posición durante largos períodos. Levantarse y tomarse un descanso de tres minutos cada media hora
  7. cuidar la salud mental. Es normal sentirse estresado, confundido y asustado durante una crisis
  8. apoyar a otras personas en la comunidad también puede ayudar
  9. controlar el estado de los vecinos, familiares y amigos. La compasión sirve como medicina.
  10. escuchar música, leer un libro o jugar también es bueno
  11. No leer o mirar demasiadas noticias si uno siente ansiedad y obtener información de fuentes fiables una o dos veces al día
  12. Recomendaciones a los Gobiernos y otras instituciones

Por su parte, Kluge ofreció otras recomendaciones dirigidas más hacia Gobiernos y otras instituciones al señalar que es esencial que poder abordar los desafíos a la salud mental pública en los próximos meses en Europa y en el resto del mundo mediante:

  1. la distribución a tiempo de información comprensible y fiable dirigida hacia todo el mundo desde los más jóvenes a los más mayores
  2. el ofrecimiento de apoyo psicológico a los trabajadores que están al frente de la lucha contra el COVID-19 y las familias afectadas
  3. el cuidado y tratamiento de las personas con discapacidades mentales y psicosociales
  4. la protección de los derechos humanos, especialmente los derechos de quienes normalmente son ignorados o violados, incluidos los migrantes o las personas con discapacidad

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