Escrito 15
Así como tú has llorado, Yeshua lloró, así como tú y hablas para dar buen consejo, así mi Padre nos habló.
Dios es único, y cada uno dentro de sí, su originalidad, su pureza, la historia jamás cambiará aunque el que la viva, sea otro
Hemos caminado con el Ángel Supremo desde su niñez, y hemos recorrido y recibido su amor como todos.
Hemos visto sus alegrías, sus tristezas, hemos oído su voz con amor, pero también hemos oído su enojo.
Muchos preguntan quienes somos, y otros más preguntan si todos esto es verdad, mas diremos que nada de lo escrito es falso.
Contamos la historia, las vivencias de nuestro Padre y del Ángel Supremo, por órdenes
Divinas y celestiales, pero si es verdad, y mas verdad es que aquellos que crean, lo comprobarán en vida, y aquellos que tanto niegan, lo verán hasta que llegue su momento.
La historia esta dentro de cada uno, la verdad es solo de aquellos que la entiendan.
No todo es como dicen, y no todo es como seguirán diciendo.
Pero si mostramos la historia que hace falta contar.
Contamos la historia del Ángel Supremo, del hombre, del amigo, del niño, la historia de un ser vivo.
Contamos la historia del Ángel Supremo el cual vivió como tú, sufrió como tú y más.
Contamos la historia del hijo de Dios que con alegría vivió y que con alegría murió por ti.
No era tan místico y mucho menos serio sin razón.
La historia del Ángel Supremo es semejanza de las vidas futuras y de las vidas que vivieron.
Su historia no tiene sexo, su historia es plural, es única, pero es tuya.
La palabra se dice y se expresa para ti, por que así fue dicha, así era la intención primero antes que manipularan aquellos de su uso de razón.
Así como tú has llorado, Yeshua lloró, así como tú y hablas para dar buen consejo, así mi Padre nos habló.
Dios es único, y cada uno dentro de sí, su originalidad, su pureza, la historia jamás cambiará aunque el que la viva, sea otro.
Fe, amor, esperanza, humildad, pureza, amistad, todo y más lleva cada uno, y así como cualquier historia, así eres tú.
Más no importa lo que diga aquel que tanto niega y mucho menos importa las palabras de desacreditacion ya que nosotros somos quien somos por órdenes de mi Padre, y ellos son quien son, por ordenes de ellos mismos.
No adoramos a falsos ídolos, más que a mi Padre, Dios es Dios y no hay otro igual. Negadores muchos van sin conocer más allá de sus creencias.
Dichosos los que entiendan.
Para creer en los mensajes que mi Padre ha dado, muchas necesitan que se hablen en lenguas muertas o en lenguas antiguas, más si no lo hacemos en estos tiempos es debido a que ellos ofenden y dicen al creyente que hablaba y que adora a Ángeles caídos.
Hablamos y expresamos el mensaje con tu lengua actual, al fin de cuentas el significado es el mismo.
Que crean es solo cuestión de cada uno, entender es de aquellos que quieran creer.
No todo es como dicen, y mucho menos es como lo será, ya que la verdad, se asomará y la razón la dará mi Padre.
Dichosos los que entiendan.
Si no hubieran tantos negadores de fe y esperanza, no seria necesario hablar y escribir, ya que todos escucharían y verían.
Autor
