EL NIÑO DEL RIO DE SAN FRANCISCO (Puebla, Pue.)

A finales de los años de 1800, se contaba que en Puebla de los Ángeles, se aparecía en el rio que cruzaba la ciudad y que era el Río de San Francisco, un niño muy hermoso, el cual con el tiempo se supo que era el mismísimo diablo, convertido en niño, pero que lo hacía para atraer a la gente hacia él.

Se conto en ese entonces, que cruzar el puente que en ese tiempo existía, era peligroso, ya que la gente contaba con muchos hombres aparecían muertos con expresión de miedo, pero sin motivo alguno de su fallecimiento.

Una de las versiones que existen y que mucho se comento de ese río, era que al querer cruzar el puente, se oía el llanto de un niño, el cual las personas que lo escuchaban y lo veían quedaban sorprendidas por verlo solo, pero sobre todo por ser un niño muy hermoso, rubio y de ojos muy azules y que al cargarlo para protegerlo y llevarlo a un lugar seguro, conforme iban caminando el niño se hacía cada vez más pesado, hasta llegar el momento de detenerse para ver porque el pequeño pesaba tanto, pero para sorpresa del que lo cargaba al bajarlo y verlo nuevamente a su cara, era miedo lo que le daba, ya que no era un hermoso niño el que había llevado cargando, sino que era el rostro del diablo, el cual comenzaba a reír a carcajadas y decir, que se apurara atravesar el puente. Pero quien lo llevaba cargando del miedo lo arrojaban al rio y salía corriendo, algunos quedaron enfermos y mudos por tal experiencia.

Otros contaron que al querer cruzar el río, veían a un niño hermoso el cual les daba los brazos para que lo9 cargaran, pero el niño no hablaba, así que lo tomaban y se lo llevaban en los hombros, dicen que el que lo cargaba le iba hablando al niño, para que no se asustar, pero al igual que el niño pesaba cada vez más conforme iban caminando, y cuando iban a cruzar el río el niño con voz tenebrosa le decía, ¡Camina mas aprisa, más rápido y empezaba a reír con unas carcajadas tenebrosas, y el hombre al bajarlo y verlo, se sorprendió ya que no era ningún niño al que cargaba, sino al mismísimo diablo que se burlaba de él, así que el mismo miedo hacía que lo arrojaran al río.

Estas historias se contaron por muchos años, sobre todo se decía que se les aparecía a los hombres que acostumbraban a trasnochar y muchos de ellos decían que era una historia falsa, pero también cuentan que muchos de esos hombres no volvieron a beber una sola copa, quedaron vivos pero enfermos de terror, diciendo que se les había aparecido el diablo.

Con el paso de los años, el Río de San Francisco, fue entubado y actualmente se le conoce como el Boulevard 5 de Mayo, dejando atrás la leyenda del Niño del Río de San Francisco.