La elección de un Papa es un asunto que se maneja muy seriamente, debido a la larga historia de los Papas elegidos en los que se encuentran incluso algunas páginas muy oscuras, durante el periodo del Papa Pablo sexto se formó la Constitución apostólica Romano Pontifici Eligen-do, esto es, el 1 de octubre de 1975 en donde la reunión de los cardenales que se hace para la elección se le llama Cónclave y se reúnen ahí en aislamiento todos los cardenales hasta que se decide quien es el nuevo Papa.

Durante mucho tiempo el Papa era elegido en una Iglesia o en algún lugar de culto, en donde participaban los obispos, miembros del clero y la comunidad de la ciudad de Roma, pero al igual que siempre, se fueron buscando los intereses de ciertas personas, los gobernantes del momento, comenzaron a inmiscuirse cada vez más, tratando de manipular la elección.

En el año 1059 Nicolás II decidió que la elección del nuevo pontífice se realizaría sólo con la votación de los cardenales, representando un gran cambio a la elección tradicional, posteriormente en 1179 Alejandro III incorporó una modificación, la de que para ser elegido Papa debía ser por el voto a su favor de las dos terceras partes del número de cardenales votantes.

Gregorio X, en 1274, incluyó la modalidad del cónclave que quiere decir “encerrados con llave”, así que desde ese momento la elección sería a puerta cerrada aislados de todo el mundo con el propósito de la elección del sucesor del papado no se llevara demasiado tiempo y que además fuera pronto para que el tiempo transcurrido sin el líder religioso no fuera muy prolongado, ya que este cónclave se realizaba con restricción de alimentos, forzando de forma física a la pronta elección.

En los cónclaves los únicos que pueden votar son los cardenales menores de 80 años, y sin exceder de 120, por lo que el número de personas que pueden votar es muy bien definido, y para ser elegido como el máximo líder religioso dentro de la religión católica no puede ser menor a 81 votos a favor, así mismo en el cónclave deben estar todos los que tiene derecho a votar salvo una situación grave, de enfermedad o situación que verdaderamente les impida estar presentes.

Además de los cardenales, aunque sin derecho a voz o a voto pueden estar presentes algunos religiosos sacerdotes con la tarea de confesar; dos médicos, un cirujano, el arquitecto del cónclave, el comandante de la Guardia Suiza, que son quienes brindan la seguridad en el Vaticano, y otras personas aprobadas explícitamente por la mayoría de los cardenales. Sin embargo, tiene estrictamente prohibido mencionar algo de lo ocurrido dentro del cónclave so pena de excomunión si revelan algo.

La reunión se realiza ahora dentro de la capilla Sixtina, inicia con la celebración de una misa y posteriormente la orden de dejar únicamente a los que tienen derecho a estar presentes, cada uno de los cardenales se dirige a una celda o habitación, excepto el cardenal camarlengo, tres cardenales asistentes, el maestro de ceremonias, el arquitecto del lugar y dos técnicos expertos, que se encargan de revisar toda la capilla, con el propósito de que evitar alguna fuga de información o con las nuevas tecnologías, que pudiera existir algún artefacto capaza de romper el aislamiento.

Durante el tiempo que están encerrados oran, meditan y piden inspiración al Espíritu Santo para elegir de manera adecuada al nuevo Papa, por lo que la elección se realiza a la mañana siguiente del encierro, existen tres formas de elección, la primera es por aclamación o inspiración en la que sin previo acuerdo uno de los cardenales propone el nombre de uno de ellos y si todos están de acuerdo en ese momento es elegido como Papa.

La segunda forma es por compromiso esto es que eligen a un grupo no menor de nueve y no mayor de quince para que deliberen, propongan y elijan al nuevo pontífice.

La tercera forma es la votación directa y que actualmente es la más utilizada en la que se deben obtener 81 votos como mínimo si están presentes todos los que deben votar, en su defecto dos terceras partes más uno, si en una primera ronda no se alcanza la votación se repetirá hasta que se consiga, la cantidad requerida.

Cuando la elección sea nula, es decir que no se alcanzó el mínimo requerido se le agrega paja húmeda a las papeletas de la votación y se queman dando como resultado el humo negro y cuando ya se llegó a la elección correcta, se quemas sólo las papeletas dando como resultado el humo blanco en señal de que ya fue elegido el sucesor papal.

Aproximadamente 30 minutos después saldrá el nuevo Papa a dirigirse hacia el público, ya con un nombre elegido un escudo y con la responsabilidad que el encargo amerita.

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