Escrito LI
Nunca decaigas y claudiques en lo que tu creas, mejor sigue cansándote hasta recibir tu recompensa.
Eres capaz de desertar a tus metas por la presencia de penurias y de cansancio pasajero en tu vida.
Nunca decaigas y claudiques en lo que tu creas, mejor sigue cansándote hasta recibir tu recompensa.
El sueño te invadirá de tal manera, que tus parpados cerraran poco a poco desviándote de lo anhelado, tus movimientos serán cada vez menores, pero tus latidos del corazón seguirán firmes.
Si tus pisadas ya no son tan largas como antes, entonces sostente lentamente con tus músculos internos, y mueve tu última pisada tan corta como puedas, ya que tarde o temprano llegarás a tu destino.
No decaigas de lo prometido, y mucho menos decaigas frente a los demás.
Dichosos los que entienden.
Cristo acercó a aquel señor viejo, que sentado en la calle tan solo veía pasar a todo aquel que frente a él caminaba.
Cristo al irse acercando, notaba tristeza en su mirada, y ya estando cerca, dijo a aquel hombre mayor.
“hola señor, como esta usted.”
Y el hombre sentado en la calle y alzando su rostro le contesto:
“estoy vivo y muerto a la vez.”
Cristo con sonrisa y cara de sorpresa por lo escuchado, le dijo:
“explícate amigo, por que vivo y muerto.”
Y el hombre poniéndose de pie lentamente, ante Iesus le dijo.
“vivo, por que aun respiro y estoy aquí, y muerto, por que nadie me hace caso, y tan solo me distraigo viendo como camina esa gente, y pienso que yo ya no puedo hacerlo como ellos, ya que estoy viejo.”
Y Cristo volteando a ver a los que pasaban por ahí, le contesto al señor aquel.
“tus caminatas como ellos ya las hiciste, y tus piernas ya recorrieron lo que tenían que recorrer.
Tu caminata te llevo directo a mi corazón y yo quisiera caminar como tú lo hiciste.”
“tu vejez es externa, y tu corazón al igual que tu alma, aun no ha ni llegado a su juventud.
Mejor sonríe por haber llegado en edad, a lo que muchos de ellos no llegarán.
“y para que quieres que te hagan más caso, si Dios ha volteado sus ojos y caminó hacia ti.”Dichosos los que entiendan.