SE FIRMA UN CONVENIO ONU-MEXICO PARA LA INVESTIGACIÓN DEL CASO AYOTZINAPA
Llegar a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición en cumplimiento de los estándares internacionales en el caso Ayotzinapa, es una obligación del Estado mexicano
Con la visita a México de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos se firmó un convenio de colaboración donde la ONU proporcionará asistencia técnica y asesoría para esclarecer los hechos sucedidos en Ayotzinapa en 2014 donde desaparecieron 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos.
UN hecho que se dio a conocer en todo el mundo y por lo tanto, como lo señala Bachelet es un caso paradigmático que muestra la gravedad de las desapariciones forzadas en México y un reto para el gobierno actual.
La firma del tratado por parte de México estuvo a cargo por el canciller Marcelo Ebrard que estuvo acompañado por la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, la subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE, Martha Delgado; y del subsecretario de Derechos Humanos de la SG, Alejandro Encinas, así como estuvieron presentes como testigos una comisión de los padres de los estudiantes normalistas y representantes de las organizaciones que los han acompañado durante este proceso de búsqueda de la verdad.
La Alta Comisionada dijo: “Llegar a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición en cumplimiento de los estándares internacionales en el caso Ayotzinapa, es una obligación del Estado mexicano. A la vez es una oportunidad para potenciar cambios de fondo en el sistema judicial que permitan alcanzar el anhelo de justicia de quienes han sufrido graves violaciones a sus derechos humanos y saldar la deuda histórica que existe con las víctimas de la violencia”.
Bachelet enfatizó que “El objetivo será alcanzar la verdad y la justicia sobre la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la escuela normal Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, y de otros crímenes perpetrados en la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014 en Iguala”.
“Prácticas como la tortura, malos tratos y actos de obstrucción de la justicia no tienen cabida en un Estado comprometido con los derechos humanos. Y ese mismo estándar es el que debe regir el caso Ayotzinapa: el pleno respeto a los derechos humanos”, agregó Bachelet.