26nov asea

Comenzaremos por dar la definición de nepotismo que señala el Diccionario Jurídico de la Real Academia Española, que dice: Nepotismo es la utilización de un cargo público para favorecer a familiares o amigos en la selección de personal, al margen de principio de mérito y capacidad.

Por mucho que les pueda molestar a algunas personas que se acuse al actual presidente de la República de cometer actos que han sido duramente criticados en gobiernos anteriores, son ciertos.

Sin embargo, ahora sus seguidores disminuyen la gravedad de dichos actos de corrupción porque se trata de la persona a quien defienden a capa y espada, pero se debe decir las cosas como son y castigar el delito, no importando de quien se trate, así es como dijo que se haría el propio presidente López Obrador, por lo que se pide sea congruente con lo que él mismo manifestó.

Tenemos varios ejemplos de nepotismo, al imponer titulares de dependencias de sus más allegados colaboradores, pero uno de los más claros es la titular de la CNDH, Rosario Piedra, que precisamente por su vinculación con el presidente en forma de fan, no debería ser la titular de un organismo autónomo.

Pero tal vez el colmo es el nombramiento de Ángel Carrizales como titular de la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente; Carrizales perteneció a la ayudantía de Andrés Manuel durante la campaña presidencial, dentro de un grupo de jóvenes que cuidaban y apoyaban en la logística a AMLO, y desde que el presidente obtuvo el cargo ha tratado de imponerlo en puestos dentro de la administración federal.

Las dos primeras ocasiones en las ternas para estar dentro de la Comisión Reguladora de Energía, aunque es químico, fue rechazado en ambas ocasiones por el Senado debido su falta de preparación y su fuerte vínculo con López Obrador.

Por tercera ocasión fue “propuesto” por Andrés Manuel, pero ahora para estar dentro del Consejo de Administración de Pemex, otro cargo importante donde se quiere imponer a una persona cercana y afín para que no se oponga a los designios del presidente, por tercera vez fue rechazado por el Senado por no alcanzar los votos suficientes.

En una cuarta ocasión fue designado nuevamente por AMLO para ser consejero independiente del Consejo de Administración de Pemex, y por cuarta ocasión consecutiva fue rechazado, llamando la atención que, siendo Morena, el de mayor número de senadores, no ha alcanzado convencer ni a los de su propio partido.

Como dicen que no hay quinto malo, AMLO lo designó para ser integrante de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), sin embargo, por quinta ocasión no fue admitido por no tener el perfil ni la preparación adecuada.

Pero como se trata de imponer y favorecer a quien considera su “favorito”, fue designado como como titular de la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente (ASEA), un puesto donde no se requiere la aprobación de alguien más, y la incompetencia no se le cuestiona, pues requiere únicamente la designación del presidente.

Ángel Carrizales López, ejemplo vivo del nepotismo de López Obrador.

La ASEA, es la encargada del proyecto de la refinería de Dos Bocas, la consulta popular al respecto, el impacto ambiental, así como de regulación en materia de hidrocarburos, por lo que se vuelve muy obvio que necesita AMLO imponer a este joven a como dé lugar en un cargo importante, una persona rechazada en cinco ocasiones por su falta de preparación y/o experiencia para ocupar un cargo de gran importancia, pero que por sus “huevos” el presidente impone, ahora en la ASEA, evidenciando el nepotismo, convirtiéndose en lo que tanto criticó, y por ende cayendo en corrupción, ¿será enjuiciado, se le congelarán las cuentas y se le quitarán sus bienes?, lo dudo mucho, pues la justicia ahora está pintada del color de un partido, y el cargo de presidente no es el de primer mandatario sino el de primer mandante, es decir, una dictadura disfrazada de socialismo.

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