LA CASA DE DON BARTOLO
Esta leyenda queretana, inicio a mediados del siglo XVII, y fue muy comentada por los hechos escalofriantes que sucedieron en esa casa, por don Bartolo y su hermana.
Don Bartolo fue un hombre según se decía muy católico y sobre todo muy rico, en esa gran casa don Bartolo que era conocido con el sobre nombre de El segoviano, vivía con su hermana, con la que sostenía relaciones incestuosa, pero que don Bartolo la tenía como ama de llaves en su casa.
Don Bartolo era un hombre muy conocido y tenía muchos amigos eclesiásticos, los cuales asistían cada vez que era su cumpleaños y este hombre los invitaba para festejar. Cada que llegaba el día de su santo, siempre hacia el mismo brindes que iniciaba con estas palabras.
–Brindo por la señora mi hermana, por mi ánima y por el 20 de mayo de 1701—
Ninguno de sus invitados preguntó jamás cual era el motivo de tal brindis, y sobre todo brindar por esa fecha a la cual le faltaba mucho por llegar. Así pasaron los años y llego nuevamente el día mencionado, don Bartolo festejo y disfruto el día, pero ese día era el tan mencionado 20 de mayo de 1701.
Todos los vecinos se encontraban ya guardados en sus casas, cuando de pronto al sonar las 12 de la noche de ese 20 de mayo de 1701, se escuchó una fuerte detonación, los vecinos que se asomaron para ver que había sucedió, dijeron que habían visto un resplandor como fuego en la casa de Don Bartolo pero que después quedo un silencio sepulcral que daba miedo.
Al día siguiente, la casa del segoviano se encontraba en completo silencio y nadie de la casa salía por lo que los vecinos llamaron al alcalde para ver qué pasaba y que abriera la puerta.
El alcalde junto con su gente abrieron la puerta y subieron a la alcoba quedando todos los presentes horrorizados al ver el cadáver de la hermana que había sido estrangulada y a don Bartolo pegado en el techo totalmente carbonizado, pero su rostro reflejaba un gesto lleno de horror.
Los vecinos llamaron de inmediato a un sacerdote para que exorcizara el cuerpo del hombre y sacarle al demonio de su cuerpo inerte.
Se conto, que al caer el cuerpo de don Bartolo al suelo, tenía en el pecho un rotulo que decía.
Castigado por hipócrita, asesino y ladrón.
Después de esto, el alcalde revisó las pertenencias de don Bartolo, encontrando un pergamino que era un contrato de pacto con el diablo, el cual le daba su alma a cambio de riquezas, gloria y honores en este mundo, a costa de rapiña y negocios sucios, con los que acumularía su gran fortuna. Pero ese pacto tenía un plazo convenido de medio siglo, plazo que termino precisamente el 20 de mayo de 1701.
Después de este horrible suceso, la casa de don Bartolo quedo abandonada, muchos vecinos decidieron irse de ahí, porque decían que dentro de esa casa se escuchaban gritos y lamentos pero también gritos de arrepentimiento.En la actualidad en esta casa se encuentra la Secretaria de Educación Pública de Querétaro.
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